jueves, 26 de noviembre de 2009

FLORES DE BACH como se preparan. www.esenciasdebach.com

Como preparar los remedios de Flores de Bach

En un frasco con gotero de 25 o 30 ml. se pone, entre 1/4 y 1/8 del frasco con Brandy. Luego se llena con agua purificada.

En este medio inerte se agregan 2 gotas de cada tintura de la flor o las flores que se quieran preparar.

Se agita levemente y el remedio está listo para tomarse.

Es importante seguir ciertas recomendaciones al combinar las flores de Bach.

Después de esto, lo que resta es saber como tomar las flores de Bach.

Según algunos estudios, el brandy es lo mejor para preparar las flores de Bach, pero pueden usarse otros licores, alcohol homeopático, vinagre, glicerina vegetal, etc.


Sobre la eficacia de las flores de Bach [editar]

Impatiens glandulifera. Lineo llamó Impatiens al género porque dispara sus semillas. Bach considero que eso la hacía apta para curar la impaciencia

La comunidad científica discute que las flores de Bach tengan algún valor terapéutico, por dos razones principalmente.

Primero, que los remedios no fueron elegidos con ningún criterio que pudiera ser considerado racional en el siglo XX, sino con uno próximo a una versión verbal de la doctrina de las signaturas que tuvo importancia en la Antigüedad, pero que ahora sólo puede verse como una forma de pensamiento mágico.

Segundo, porque contradice todo el conocimiento científico desarrollado experimentalmente desde la Ilustración, basado en la interpretación de los fenómenos como resultado de la interacción física entre los sistemas materiales, una vez superada la suposición de que los campos de fuerza, tales como la gravedad o el electromagnetismo, son formas de manifestación de lo espiritual, y no fenómenos materiales. Para las flores de Bach se usan diluciones que van más allá de lo que permite la divisibilidad de la materia, cuyo carácter particulado y discontinuo estaba probado desde los orígenes de la Química. Sin embargo, los elaboradores de esencias florales dicen que lo efectivo de las esencias florales no está en que haya alguna sustancia química disuelta en la preparación (lo que no es esperable dada su elaboración), sino en las "vibraciones" o "características vibracionales" que poseen los preparados, y son de diferentes características para cada esencia floral. Tales «vibraciones» no se corresponden con ningún aspecto de la realidad conocido por la ciencia, ni desde luego con la vibración de las moléculas, sino con el tipo de entelequia a que se refieren frases como «tener buenas vibraciones».

Flores de Bach



Flores de Bach, también llamadas remedios florales de Bach o esencias florales de Bach, es la denominación genérica y comercial de un conjunto de 38 preparados naturales no farmacológicos, símil-homeopáticos, elaborados a partir de una decocción o maceración en agua de flores maduras de diversas especies vegetales silvestres o naturalizadas de la región de Gales y la Inglaterra contigua, diluida en brandy (destilado del vino, usado como medio conservante).[1] [2] El preparado resultante, almacenado convenientemente en frascos-gotero de vidrio opaco para su comercialización, es una solución hidroalcohólica diluida en proporción 1:144 (jugo de flores/brandy), sin principios farmacológicamente activos (no es un medicamento), y por lo tanto, no posee acción biológica o fisiológica alguna (como lo demuestran varios ensayos clínicos). Aunque la mayoría de los «remedios florales» están elaborados cada uno según un tipo específico de flor y algunos también con otras partes de la planta (brotes, hojas, corteza), estos preparados no son productos fitoterapéuticos ni tampoco de uso en aromaterapia.

«Flores de Bach» es un epónimo referido a su creador: el médico inglés Edward Bach (1886-1936), quien inventó y desarrolló estos preparados en la década de 1930, entendiendo exclusivamente su uso en una modalidad terapéutica —conocida actualmente como terapia floral—, cuyo valor terapéutico está severamente cuestionado (ver más abajo) por los estudios clínicos realizados.

Según el Dr. Bach, el uso de las flores de Bach está destinado a aliviar desequilibrios psicoemocionales y de carácter (tales como miedo, impaciencia, angustia, incertidumbre, ira, confusión, intolerancia, timidez, entre otros) para influir o prevenir padecimientos físicos y/o psíquicos (enfermedades). Básicamente, Bach concibió el uso de sus remedios basándose en la hipótesis de que las enfermedades son consecuencia de trastornos o desequilibrios de la dimensión emocional-mental de la personalidad producto de un conflicto Alma-Personalidad. Este tipo de ideas forman parte de la concepción mística de Bach sobre la salud-enfermedad.

o por los resultados presentados en los ensayos clínicos controlados (A

Terapia con flores de Bach [editar]

Actualmente, la terapia con flores de Bach es encuadrada como una variante de terapia médica alternativa pero su clasificación es difícil y generalmente es considerada como una variante de la Homeopatía, lo que es declarado inadecuado técnica y procedimentalmente por algunos practicantes, pero sirve para que su venta quede sujeta a las reglas que rigen para los productos homeopáticos. Su implementación y aplicación como terapia generalmente no están reconocidas oficialmente por los sistemas sanitarios estatales, y menos aún reglamentadas legalmente (excepto en Chile y Cuba).

El estatus terapéutico de las flores de Bach es severamente discutid

rmstrong & Ernst, 1999; Walach et al., 2001; Pintov et al., 2005) y sometidos a revisión según estándares científicos (Ernst, 2000), interpretando la limitada efectividad terapéutica alcanzada, como en la homeopatía, como una consecuencia del efecto placebo, y negando efectos específicos (por ejemplo, como ansiolíticos en situaciones de estrés).

Por otra parte, a la luz de la ciencia químico-farmacológica, son discutidos la metodología de elaboración y también los posibles mecanismos de acción de estos "remedios" florales en función de su carencia de principios activos de orden vegetal (recuérdese que no es una forma de fitoterapia)

En consecuencia y prudentemente, se advierte sobre el riesgo para la salud de usar este tipo de terapia —sin un aval científico— en casos de enfermedades o trastornos serios. En este contexto, existen posiciones encontradas —a favor y en contra— concernientes a la efectividad y utilidad de las esencias florales de Bach como forma de tratamiento (ver más abajo).

Detractores más severos sobre el uso de la flores de Bach, lejos de concebirlo como una forma de terapia, entienden su comercialización por demás lucrativaestafa. En otro aspecto las flores de Bach también son consideradas como un invento propio del pensamiento mágico, una forma de pseudociencia sin fundamentos científicos. y aún como una forma de